Handsfree Transporter: Un SegWay manos libres.

El innovador vehículo de dos ruedas conocido como SegWay nunca logro convertirse en un producto de venta masiva. Ahora, una especie de de “clon mejorado” ha aparecido en el mercado, esperando tener mejor suerte que aquel. Por lo pronto, el hecho de no necesitar las manos para conducirlo parece ser un importante punto a favor.

Tengo que reconocer que si hubiese podido, habría comprado un SegWay. ¡Vamos, si es la forma más geek de ir de un lado a otro! Pero si tuviese uno en casa, ya lo hubiera puesto en venta en eBay, para juntar dinero y comprarme un Handsfree Transporter.

Este vehículo, una especie de clon del SegWay, comparte muchas de las características del otro. Solo tiene dos ruedas, se mantiene en equilibrio mediante algún conjuro invisible, y se dirige con los desplazamientos del centro de gravedad del conductor. Pero a diferencia del SegWay, no necesitas usar las manos para mantenerte sobre él.

En lugar de una barra con un manillar para sostenerse, el Handsfree Transporter tiene un par de almohadillas a la altura de las rodillas que permite que te mantengas en pie simplemente juntando tus piernas con fuerza.

El hecho de no necesitar las manos para sostenerte sobre él hace del Handsfree Transporter un vehículo ideal. De hecho, cuando caminamos de aquí para allá no empleamos las manos, y nos hemos acostumbrado durante siglos a llevar cosas útiles en ellas. Esta es la mejor fortaleza del Handsfree Transporter.

En su página web muestran varias aplicaciones para el vehículo. Por ejemplo, se hacen mucho hincapié en el uso como transporte para un camarógrafo dotado de un handycam, esos dispositivos que permiten filmar escenas en movimientos mientras mantienen la cámara perfectamente estable.

No hay demasiados datos técnicos aún, pero se sabe que pesa 40kg y que una persona a bordo de este gadget se desplaza unas tres veces más rápido que caminando. Y para mí, eso esta más que bien: no estamos comprando un coche de carreras, si no un vehículo urbano, o para desplazarse dentro de plantas industriales o museos (por ejemplo), por lo que no se necesita más velocidad que esa.