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Las mascotas y la evolución humana

La habilidad para domesticar animales y utilizarlos como compañía parece ser una característica única en los humanos. Aunque en principio esta actividad puede parecer contraproducente, parece que el cuidado de los animales y su utilización en tareas como la caza impulsó el desarrollo de la tecnología y los idiomas. Si Pat Shipman, una paleoantropóloga de la Universidad de Penn State, está en lo cierto, entonces los perros, gatos, vacas y otros animales domésticos jugaron un papel clave en la evolución humana.

¿Tienes una mascota en casa? No la descuides: puede que sus ancestros hayan colaborado de forma importante en la evolución de nuestra especie. O al menos, eso es lo que sostiene una nueva teoría publicada por Pat Shipman, una paleoantropóloga de la Universidad de Penn State. Según este científico, la costumbre -exclusivamente humana- de utilizar animales como compañía y como ayuda a la hora de cazar otros animales, nos ha impulsado hacia adelante en la escala evolutiva.

El poseer animales y domesticarlos ha hecho que la humanidad sea más eficiente a la hora de desarrollar un lenguaje o construir herramientas. “Cualquiera sea el lugar del mundo que visite, sin importar como sea su ecosistema o la cultura de ese sitio, encontrará que la gente vive con animales“, asegura Shipman.

Fuimos lo suficientemente astutos como para domesticar animales.

Sin embargo, cuando uno se pone a pensar en ello sin profundizar demasiado, puede que compartir la vivienda o los recursos con animales de compañía parezca no ser tan buena idea. En primer lugar, e independientemente de la época histórica que elijamos, cada animal representa una boca más para alimentar, y en momentos de escasez -un duro invierno, por ejemplo- difícilmente querríamos tener esa carga extra en nuestra “economía familiar”. Pero Shipman ha notado que hace unos 2.6 millones de años el hombre hizo un cambio que le permitió afrontar esta situación: cambió de una dieta principalmente basada en vegetales a una rica en carnes.

Esto fue posible gracias a que inventamos herramientas de caza de piedra que nos otorgaron una ventaja decisiva frente a otros grandes depredadores. “Fue un cambio rápido y extraño para todos los animales”, dice Shipman. “Tenemos acceso directo a todo el proceso evolutivo“, explica Shipman, “y obviamente no estamos preparados físicamente para ser carnívoros”.

Sin embargo, y tal como Pat explica en un artículo publicado en el último número de Current Anthropology, fuimos capaces de suplir esas carencias (falta de garras y dientes enormes, por ejemplo) con herramientas y técnicas de caza y rastreo basadas en nuestra principal característica: la inteligencia. Fuimos lo suficientemente astutos como para “domesticar” animales que ya sabían cazar -como lobos y otros caninos- y utilizarlos para nuestros fines. Otros, como las cabras, vacas y caballos, nos proporcionaron leche, lana, cueros y carne.

No estamos preparados físicamente para competir con estos gatitos.

El problema que implica la gestión y cuidado de todos estos animales requiere de tecnología, conocimiento y un mecanismo para conservar y transmitir toda esa información a nuestros descendientes o a las tribus vecinas. Según Shipman, esta necesidad ha sido fundamental a la hora de desarrollar un idioma y evolucionar para responder a los desafíos planteados. La habilidad necesaria para seguir un rastro puede haber sido, de hecho, el origen de la investigación científica.

Peter Richerson, profesor emérito en el Departamento de Ciencias Ambientales y Políticas de la Universidad de California, afirma que este hecho está documentado en los petroglifos y pinturas rupestres que algunos pueblos antiguos nos han dejado en diferentes sitios del mundo. Las figuras más antiguas eran abstractas, diseños geométricos sin sentido, imposibles de descifrar. Pero algo más tarde, los artistas prehistóricos comienzan a converger en torno a un mismo tema: los animales. “Casi no aparecen personas, paisajes, frutas o plantas comestibles”, dice Shipman. Esto implica que los animales y la información sobre ellos era de gran importancia.

Nuestras mascotas y animales de granja quienes nos ayudaron a evolucionar.

También, a lo largo de la historia, se han producido importantes cambios genéticos, tanto en los seres humanos como en los animales, explica Shipman. Los humanos hemos realizado cruzas y cría selectiva de los ejemplares que poseían rasgos específicos y útiles para nuestros propósitos. Así es como, a lo largo del tiempo contamos con los “favores” de vacas capaces de dar más leche o gallinas que ponen más huevos. Hasta aquí no hay nada demasiado novedoso en la teoría de Shipman.

Sin embargo, el especialista asegura que esta “especialización evolutiva” ha tenido lugar en ambos sentidos. Mientras que nos ocupábamos de domesticar y mejorar a los perros, por poner un ejemplo, estos nos hacían evolucionar a nosotros. Si Shipman está en lo cierto, y la evidencia evolutiva parece confirmarlo, fueron nuestras mascotas y animales de granja quienes nos ayudaron y acompañaron a lo largo del camino evolutivo que nos permitió elaborar desde hachas de piedra hasta transbordadores espaciales. ¿Que te parece?

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Escrito por Ariel Palazzesi

15 Comments

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  1. -No es una característica única de los humanos: se sabe que especies de hormigas ya habían aprendido a domesticar pulgones, hongos, plantas, orugas, etc. millones de años antes que nosotros.

    Y lo que es más asombroso: ellas lograron hacerlo sin destruir ecosistemas ni someter a sus domesticados a crueles experimentos.

    • Espero que no tengas ninguna mascota, no quiero saber lo que les haces, humano.

      Yo tengo un perro y lo cuido muy bien y no hay dia que vuelva a casa sin que me de una bienvenida calurosa… y soy humano.

    • la crueldad es meramente subjetiva el universo es indiferente ante estos acontecimientos… aunque… yo que se, ahora que lo pienso jaja solo una opinion 🙂
      experimentos no experimentos contaminar no contaminar la cosa es hacer lo que sabemos hacer a mi manera de ver las cosas.

  2. se que las hormigas generan hongos para comer con lo que agarran en el exterior…. pero de eso…a domesticar son dos cosas muy diferentes h1… y no no es asombroso lo que dices nosotros tambien domesticamos a nuestros animales sin destruir ecosistemas, ni someterlos a crueles experimentos (Tal ves lo hagamos pero no tuvimos que hacerlos para domesticarlos). Por favor no mezcles cosas que no tienen nada absolutamente nada que ver… y como te digo no es lo mismo tenerlos en un corral o un lugar confinado a que nos den cierto tipo de compañia como lo hacen los perros gatos, y algunas personas gallos gallinas, es diferente tenerlos en jaulas a domesticados, lo entiendes?, y tambien es diferente hagarrarlos y tenerlos para que nos generen comida (Como lo hacen las hormigas)

    • Por meter un poco el dedo en la llaga:

      Se sabe que hay especies de primates que "adoptan" a otros animales en su circulo social. Como por ejemplo los babuinos con los perros del desierto, que los "secuestran" a la fuerza cuando son cachorros pero a la larga se integran en su familia y les ofrecen proteccion y seguridad.

  3. Si se comenzaron a domesticar los animales por el 10.000 a.C. no se como ha influido eso en la evolucion… para entonces ya estabamos evolucionaditos, con lenguaje y con armas

  4. Una vez vi en un documental unos simios que robaban crias de perros y luego los criaban ellos para que una vez adultos defiendan al grupo, sobre todo por la noche.

  5. ¿Sabiais que los humanos somos mascotas de extraterrestres?

    Ellos aprenden de nosotros, les hacemos el trabajo duro, nuestra evolucion es su aprendizaje.

  6. Esto es un enorme potencial de fail. piensa encontrar un relación 2,6 millones de años atrás o entre 40.000 años atrás y el último máximo glacial? Esta tipa está loca.

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