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WI-FI a la velocidad de la luz

Investigadores estadounidenses optimizan la tecnología inalámbrica óptica aparecida en los años 70 y la convierten en un referente mundial de velocidad. Se alcanzan anchos de banda del orden del gigabit por segundo, récord entre los sistemas sin cable y que pueden revolucionar las comunicaciones futuras. El truco está en la luz, infrarroja para más señas. Con ella es posible disparar las tasas de transmisión de datos y convertir los entornos cerrados en centros de información ultraveloz.

Las transmisiones Wifi habituales se basan en la radiofrecuencia. Los datos son transmitidos por microondas que son capaces de atravesar paredes y de alcanzar distancias considerables hasta alcanzar con eficacia el receptor. Sin embargo, Jarir Fadlullah y Mohsen Kavehrad, expertos del Centro de Información e Investigación de Tecnología de las Comunicaciones de la Universidad de Pennsylvania, han logrado superar todos los récords de velocidad en conexiones inalámbricas gracias al sistema óptico de transmisión de datos que están experimentando.

Su configuración logró enviar datos a través de una habitación mediante la modulación de un haz de luz infrarroja enfocada en el techo y recogiendo los reflejos utilizando un fotodetector especialmente modificado. Alcanzaron 1.6 gigabits por segundo en sus primeros intentos, sin embargo, los científicos afirman que sus medidas muestran que el sistema podría soportar cuotas muy por delante del gigabit por segundo al que se refieren actualmente.

Los LED blancos de última generación serán los soportes perfectos para esta tecnología

Kavehrad y Fadlullah construyeron el sistema experimental utilizando un láser infrarrojo de baja potencia para así prevenir cualquier tipo de daño en los ojos o la piel. Enfocaron la luz a través de una lente, creando un punto elíptico en el techo; después utilizaron un detector de luz de alta sensibilidad, llamado "fotodiodo de avalancha", para recoger la luz reflejada del techo. Utilizaron una lente holográfica plástica para recoger la suficiente cantidad de luz reflejada del punto en el techo y enfocarla en el área activa del fotodiodo. Gracias al uso de la lente, pudieron transmitir una señal óptica de un gigabit por segundo a través de una habitación de alrededor de 8 metros de largo por 4 metros de ancho.

Los entornos cerrados son ideales para la transmisión óptica

Además de conseguir estas altísimas velocidades sin necesidad de cables, las transmisiones ópticas no afectan a los equipos electrónicos, dispositivos édicos o sistemas de navegación. Por otro lado, son más seguros que las radiofrecuencias porque no pueden ser vulnerados desde el exterior. Afirma también que, al contrario que con las radio frecuencias, la región espectral de toda la luz—la infrarroja, la visible y la ultravioleta—no está regulada a nivel mundial. Esto podría facilitar la comercialización de redes inalámbricas ópticas puesto que el espectro de las radiofrecuencias se encuentran ya bastante congestionado.

Entre sus desventajas encontramos el uso exclusivo en espacios cerrados que permitan la captación directa de la luz infrarroja que emiten los dispositivos. Hablamos de una tecnología de corto alcance, que sólo puede aprovecharse en habitaciones y salas donde la señal pueda viajar sin encontrarse obstáculos y llegar hasta el receptor específico.

Los láseres infrarrojos consiguen alcanzar 1 gigabit por segundo

Kavehrad advierte que “hay que llevar a cabo muchos procesos de ingeniería” antes de que las redes inalámbricas ópticas se conviertan en una realidad. En su sistema experimental, él y Fadlullah utilizan láseres, transmisores y receptores que no están diseñados para las comunicaciones; todo ese equipamiento debe ser optimizado para su uso con redes de datos. Sin embargo, afirma Kavehrad, si el desarrollo de los LEDs blancos para la luz interior continúa con su ritmo actual, podría ser posible tener redes inalámbricas ópticas dentro de 3 años. El futuro de esta tecnología parece muy prometedor pues también existen empresas como Intel, InterDigital, Siemens, Sony, Samsung, Mitsubishi y Sanyo, que están llevando a cabo investigaciones dentro de este sector. La luz es la solución.

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Escrito por imported_Kir

11 Comments

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  1. …y nos olvidamos de las velocidades de tortuga actuales…jeje. Así pronto también éste tipo de tecnologías propulsarán nuestras mentes y cuerpos atraves del espacio. La ciencia ficción actual es solo el adelanto de lo que vendrá después. Seguro.

  2. Muy interesante el artículo, solo por ahí un error de dedo (espero), en la parte en negritas "Alcanzaron 1.6 gigabites por segundo" no son gigabites, si no gigabits, ya que se puede entender como gigabytes, lo que es muy diferente :D. De nuevo, bien por el artículo

  3. Se asemeja al IrDA ,con caracteristicas muy superiores en alcance y velocidad, pero con el mismo problema y es la imposibilidad de comunicación entre distintas habitaciones.

  4. utilizar la iluminacion led de la habitacion como un medio para transmitir informacion a alta velocidad es una buena idea y no tan dificil de implementar…..

  5. Ayyy, yo quiero conectarme a la holored junto con la energía eléctrica libre que llega de la torre Wardenclyffe (que a su vez la recibe del anillo de Dyson D: )

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