Maximiliano Ferzzola
Con un título que hace pensar “hey, ¿otro clon de Space Invaders?", Galactic Invaders es mucho más que un juego de naves en el espacio. Es un completo y complejo juego de estrategia en tiempo real (o RTS, si te place) en pleno espacio exterior. Es que la humanidad necesita otros planetas para contaminar y nada nos detendrá en la conquista espacial.
Ya está más que claro: estamos bien ante un cambio de paradigma en la Tierra o frente a nuestra propia extinción. Los recursos naturales se agotan, el clima está cada vez más desquiciado, los bebés siguen naciendo mientras cada día la expectativa de vida aumenta, las grandes pestes comienzan a asomar en el horizonte y, para colmo, siempre hay un asteroide que nos pasa rozando. ¿Qué podemos hacer? Pues, como ya dijimos antes, o bien arreglamos todos nuestros problemas en casa (como debe ser) o nos apuramos a colonizar otros planetas, porque el tiempo se acaba más rápido de lo pensado (a los humanos, no a la Tierra).
Galactic Invaders, sin meterse en política, podría ser uno de los tantos escenarios a sucederse en el lejano futuro de la exploración espacial humana. Con una base (la Tierra) y dos planetas en nuestra posesión, en Galactic Invaders los humanos queremos expandirnos (como siempre lo hemos querido) y destrozaremos a cualquier civilización que ose decirnos lo contrario. En Galactic Invaders, ¡nosotros somos los invasores! Lo que queda demostrado en las instrucciones del juego: “Al comienzo, tu enemigo no tiene ni idea de que estás avanzando. Cuanto más planetas invades, más poderosos serán sus contraataques.” Sí, ellos se defienden, mientras nosotros atacamos. ¿Injusto? Es la humanidad, ¿qué pensabas que íbamos a hacer?
El componente estratégico de Galactic Invaders es muy profundo: Tienes 4 tipos de planetas, una buena selección de naves con diferentes características, todo un mapa intergaláctico que conquistar y controles en tiempo real (cosa rara en el mundo flash). Los planetas a conquistar comienzan “en blanco”, sin ninguna característica. Cuando los conquistas puedes seleccionar una de las siguientes: Comercial, Industrial, Investigación o Fortaleza.
Hacer un planeta comercial aumenta la capacidad de producción de tu imperio. Un planeta industrial permite construir naves en ese punto del espacio, además de “curar” a las naves en su periferia. Crear un planeta de investigación permite construir nuevos modelos de naves (que dependen de una X cantidad de puntos, a mayor poder más cara). Los planetas fortaleza no aportan nada, pero tienen un poderosísimo cañón que dispara a todo lo que se acerque y una defensa x2. Las naves vienen de todo tamaño y sabor. Desde las más pequeñas al principio, a las más pesadas al final. Hay de defensa, ataque, exploración y algunas con efectos muy útiles.
Con estos componentes, que pueden parecer pocos, Galactic Invaders se empeña en crear partidas difíciles y que requieren de una administración compleja de nuestros recursos. La posibilidad de mover las naves en tiempo real, lo hacen parecer más a un Command & Conquer que a un Galactic Civilizations (solo para poner dos ejemplos).
En resumen, si la estrategia y la administración te gustan, juega Galactic Invaders, que no defrauda. Si por alguna razón no lo encuentras a tu gusto, puedes probar con Bug War, que tiene un planteo completamente diferente, pero mola mucho. Para los fanáticos de Civilization también hay, para ellos Imperium es un impresincible. Por último, uno de mis preferidos: Witch Hunt 2, un juego donde la bruja a quemar, ¡eres tú!
