La historia detrás de la pistola de «Predator 2»

A menos que hayas pasado los últimos 27 años en coma o peleando con una civilización extraterrestre al otro lado de la galaxia, la lógica sugiere que has visto Predator 2 en más de una ocasión. Una escena particularmente memorable nos enseña a uno de los Depredadores entregando un extraño trofeo al personaje de Danny Glover: Una pistola del año 1715. ¿Cómo llegó esa pistola a un proyecto de ciencia ficción? ¿Cuál era la idea de los productores? Hoy vamos a responder eso.

Predator 2 llegó a las salas el 21 de noviembre de 1990, y rápidamente se convirtió en uno de los mejores clásicos bajo el formato VHS. La he visto más de quince veces, e imagino que muchos de nuestros lectores están en una situación similar. Dicho eso, hoy vamos a hablar de una escena (no es un spoiler, y me niego a reconocer esto como spoiler)… o para ser más precisos, de un objeto en una escena. No se trata de la cabeza del Xenomorph colgada como trofeo, detalle que disparó a toda la saga Alien vs. Predator, y que luego fue adaptada al cine de manera desastrosa. En realidad, me refiero a esto:

Después de haber combatido a través de toda la ciudad y sufrido múltiples heridas, el detective Mike Harrigan enfrenta al Depredador en un mortal combate mano a mano dentro de su nave espacial, y con una astuta maniobra en el último segundo, logra salir victorioso. El resto del clan de Depredadores observó de cerca la pelea, se «presentan» frente a Harrison, retiran el cuerpo del cazador caído, y uno de ellos hace algo muy llamativo: En reconocimiento a la fuerza, la destreza y la determinación de Harrison en el campo de batalla, le entrega como trofeo una vieja pistola, con un nombre y un año grabados en el bronce: Raphael Adolini, 1715. La simple idea de que los Depredadores hayan visitado la Tierra durante los últimos 300 años hizo delirar a los fans, y la pregunta fue automática: ¿Cómo obtuvo el Depredador esa pistola?

La pistola de Raphael Adolini

Básicamente, la escena fue desarrollada porque los escritores y los productores querían dejar instalada la posibilidad de una secuela «en el pasado», pero esa secuela jamás abandonó el tablero de dibujo, y la saga debió esperar 20 años para recibir una continuación directa. ¿La solución? Convertir a aquella historia en un cómic. El nombre oficial es Predator: 1718, creado por Henry Gilroy y Igor Kordey, y publicado en julio de 1996.

El cómic revela que Raphael Adolini era el capitán de un barco pirata, quien en su momento conoció al mismo Depredador que le entregó la pistola a Harrison. El Depredador siguió la actividad de Adolini en la Costa de Guinea, donde el capitán debió enfrentarse a su tripulación amotinada. Lógicamente, el problema era dinero: Los piratas saquearon una iglesia y mataron al sacerdote, a lo que Adolini vio como «una violación del Código». Cuando Adolini declaró que regresaría el botín, los tripulantes decidieron colocarlo tres metros bajo tierra.

Camuflado y como observador de privilegio, el Depredador se transforma en un inesperado compañero de equipo de Adolini, y juntos acaban con los piratas. Sin embargo, cuando todo parecía listo para un combate limpio entre ambos, Adolini recibe el disparo de uno de sus hombres por la espalda, a traición. El Depredador aniquila al sobreviviente de un cañonazo, y con sus últimas fuerzas, el capitán le entrega al Depredador su arma, quien devuelve el gesto cavando una tumba y dejando su espada allí.

La historia es corta, apenas nueve páginas, pero la magia de Internet se ha encargado de guardar varias copias en línea, como la que puedes encontrar aquí (página 46). Y eso es todo: La pistola era un gancho para una secuela que nunca se hizo, y terminó con cómic propio. El concepto de «Depredadores en la antigüedad» fue explorado más tarde en fan films y otros proyectos secundarios, pero la franquicia sigue viva, pronto habrá una película nueva, y nunca debemos cerrar la puerta.