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F.E.A.R. 2: Project Origin

Luego del éxito acumulado por la primera parte, estábamos con mucha expectativa por la secuela desarrollada por Monolith. F.E.A.R. quedó en la memoria de todos como uno de los FPS más aterradores de todos y seguir sus pasos no es tarea fácil. Esta secuela no tiene un cambio radical sobre el primero e intenta mejorar sobre lo que ya estableció anteriormente. ¿Estará a la altura de la situación?

Decir que el primer F.E.A.R. daba miedo es una obviedad. Por algo fue que lo pusimos en nuestra lista de juegos más terroríficos de todos los tiempos. Los muchachos de Monolith lograron combinar el género de acción en primera persona con muchos elementos tácticos y una atmósfera aterradora. Encima, la inteligencia artificial de los enemigos fue muy elogiada, ya que podían utilizar objetos del medioambiente para cubrirse y eran sorprendentemente agresivos. Por todo esto y mucho más, uno esperaría que esta segunda parte ni le llegue a los talones al original… y no lo hace, aunque de todas maneras F.E.A.R. 2 tiene méritos para ser un buen juego.

La historia continúa justo luego del final del primero, que por el bien de no arruinar una buena historia solo diremos que hubo una gran explosión que destruyó gran parte de la ciudad. En este caso tomas el rol del soldado Michael Becket, quien integra el grupo conocido como Delta Force. Becket y sus compañeros se infiltran en un edificio en busca de Genevieve Aristide, la presidente de la compañía Armacham Technology Corporation, cuyos integrantes estaban detrás de toda la conspiración. Claro que durante el camino te encontrarás con el ejerectio de clones que ahora se ha rebelado y también con Alma, la joven fantasma que hace estragos a cada paso que da.

La trama no es mala en sí, pero desde el principio tiene una enorme desventaja que el primero no tenía. Ya no hay tanto misterio. En el original todo era muy confuso, el origen de Alma, por qué hacía lo que hacía. Y hacía un gran trabajo de lentamente explicar todo. Ahora que ya conocemos a Alma y lo que es capaz de hacer ya no tiene el mismo misterio. Falta aquel miedo a lo desconocido que tanto caracterizó al anterior. Pero como dijimos, la historia de F.E.A.R. 2 no es mala, hace un buen trabajo desarrollando aún más la conspiración y aunque el final puede ser un poco repentino, durante el juego hace un buen trabajo de mantener el suspenso.

Tal como en el primero, Alma (que ahora no es una niña, sino una mujer) sigue acechándote en todos los pasillos y tiene un par de momentos memorables, que serán difíciles de olvidar. De todos modos, no es tan aterrador como el primero, a pesar de que todas esas secuencias están muy bien logradas. Otro elemento de la jugabilidad que vuelve es la cámara lenta, que te ayuda a lidiar con situaciones extremas. Los avances en la tecnología hacen que estos momentos sean mucho más disfrutables que el primero y pulverizar enemigos en cámara lenta no aburre en ningún momento.

Por el lado de la inteligencia artificial aún no nos hemos decidido si es que ha empeorado, o el juego se ha hecho más fácil. Es cierto que hay muchos medikits rondando por los niveles y la cámara lenta hace todo mucho más fácil, pero en muchas ocasiones nos topamos con soldados que ni se habían alertado de nuestra presencia, a pesar de estar exactamente al lado. Así que podríamos decir que es un poco de ambas: la inteligencia artificial ha decaído un poco y a la vez, el balance general del juego está hecho para que no sea muy desafiante.

El diseño de los niveles tiene un lado positivo y uno negativo. El positivo es que corrigieron una de las quejas principales del juego original. Muchos se quejaron de que no había variedad y todo el tiempo te la pasabas correteando por oficinas. Project Origin no solo tiene oficinas, sino también muchos exteriores y otro tipo de escenarios. Pero no dejes que eso te confunda, porque aunque hay variedad en los ambientes, siempre siguen el mismo patrón del pasillo claustrofóbico.

Debido a la mentalidad de “pasillos claustrofóbicos”, Project Origin se convierte rápidamente en un juego muy lineal, tal vez demasiado lineal. No es que sea tan malo, al ser lineal mantienen el paso del juego, ya que es muy difícil que el jugador se pierda. Sin embargo, también se vuelve muy monótono. No es fácil hacer un juego lineal y que no se vuelva aburrido, y F.E.A.R. 2 lo logra por muy poco.

Una de las tantas cosas positivas que tenía original era la balística. Disparar un arma simplemente se sentía bien. Y en F.E.A.R. 2 no es diferente. Para hacer este análisis jugué nuevamente al primero y debo decir que disparar ya no se sentía tan bien, a pesar de que recuerdo haber estado muy impresionado por lo real que se sentía en su momento. En Project Origin, Monolith llevó su concepto a la nueva generación y lo ha hecho con mucho éxito. Las armas se comportan de una manera muy real y lo mismo sucede con los enemigos.

El apartado gráfico deja una muy buena primera impresión, sin embargo a medida que pasa el tiempo se comienzan a notar sus falencias. No es que sean malos, pero no están a la altura de lo que uno esperaría. Las texturas son buenas, como los modelos de los personajes, pero la falta de detalle en todo es una pena. El diseño de algunos escenarios también deja mucho que desear, porque puede romper la atmósfera que tanto tiempo le costó construir.

La parte gráfica que se lleva los halagos son los efectos. Todas las secuencias fantasmales están repletas de filtros muy bien utilizados y efectos sorprendentes. El sistema de partículas una vez más es increíble y los momentos en los que las visiones te transportan de un lado a otro se ven geniales. Sin embargo en cuanto a miedo, esta secuela no se puede comparar al primero. Puede hacerte saltar algunas veces, pero no necesitaras cambio de pantalones.

Tanto en el F.E.A.R. original como en esta segunda parte te pasarás mucho tiempo escapando de enormes robots que quieren convertirte en polvo, pero a diferencia del anterior aquí tendrás la oportunidad de manejar uno de ellos y es tan gratificante como uno podría imaginar. Con un par de disparos de la metralleta puedes convertir a tus enemigos en cenizas, o también puedes disparar a las paredes y destruir gran parte de los edificios. En ocasiones deberás enfrentar robots del mismo estilo y las pocas veces que sucede son batallas épicas.

Otro gran aspecto del original era su modo multijugador. Hoy en día hay personas que aún juegan partidas de F.E.A.R. Combat. Sin embargo en Project Origin no es tan particular como lo fue antes, sino que es bastante mediocre. No porque sea malo, sino porque es uno más del montón. Como está de moda ahora, puedes jugar en partidas de ranking donde podrás desbloquear armas y otro tipo de cosas. A diferencia del juego anterior, no puedes utilizar la cámara lenta, lo que resulta en un juego más balanceado pero menos divertido. Lo único que se destaca en este modo es el mapa en donde hay dos robots, uno para cada equipo. Aunque es muy divertido cuando te encuentras sobre él, cuando no es bastante aburrido, porque no hay manera de ganarle, solo puedes rezar para que quien este sobre el robot de tu equipo destruya al otro.

Como casi todos los juegos de esta magnitud, F.E.A.R. 2: Project Origin se encuentra disponible para PC a €45.95, y para Xbox 360 y PlayStation 3 a €61.90. Es cierto que el precio es elevado, pero no es diferente al resto de los juegos AAA. La duración puede rondar entre las 8 y 10 horas, y una vez terminada la campaña principal solo te queda el modo multijugador.

En definitiva no sería justo comparar esta secuela con su predecesor, más que nada porque hay que ponerlos en contexto. El primero apareció en un momento en donde no era muy común que los FPS tengan algo más que acción y aquel lo tenía todo: atmósfera, historia, realismo, inteligencia artificial y una excelente utilización de las situaciones scripteadas. Esta segunda parte sigue la misma línea del anterior, pero nada es ya tan innovador o sorprendente. De todas maneras siguen demostrando que pueden tener una gran atmósfera y una sublime utilización de las situaciones scripteadas. Más allá de las comparaciones F.E.A.R. 2 es un juego de acción más que solido y merece ser experimentado.

Puntaje: 84%

Conclusión: No es tan bueno como el primero, pero sigue siendo un juego de acción solido con mucha atmósfera.

Escrito por Tomás Garcia

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