Lisandro Pardo
La serie 3DMark de herramientas para realizar benchmarking en ordenadores ha conservado durante muchos años su posición como la más estimada entre la prensa especializada y los usuarios. La versión Vantage es la anteúltima de dicha serie, pero eso no quiere decir que resulte menos útil para generar puntuaciones de tu hardware actual. Además de recibir una serie de actualizaciones, la gente de Futuremark ha decidido que la edición Basic de 3DMark Vantage sea ahora freeware, ofreciendo sin costo benchmarks ilimitados, y una excelente oferta para actualizar a la versión Avanzada.
En la mayoría de los casos, el usuario promedio no le presta mucha atención a aquellas herramientas que calculan la velocidad estimada del ordenador. Esto se debe a que ese mismo usuario promedio suele estar batallando con cuestiones como la conexión a Internet, los archivos extraviados, los virus, la falta de respaldos, o todos estos ejemplos a la vez. Pero la comunidad de entusiastas sigue muy de cerca a todo lo relacionado con el benchmarking, sea procesador, memoria o tarjeta gráfica. Si alguien realiza overclocking, el aumento en la velocidad de reloj es reportado de inmediato, sin embargo, para tener una referencia más clara no hay nada mejor que las pruebas consideradas sintéticas, y entre ellas, 3DMark está a la cabeza desde hace mucho tiempo.
En estos días, la versión más moderna de 3DMark es la 11, lanzada en diciembre del año pasado. Esta versión es exclusiva para hardware compatible con DirectX 11, y no se ejecutará con un hardware de vídeo anterior. Sin embargo, si tu tarjeta es capaz de lidiar con DirectX 10, entonces la edición Vantage es más que recomendada. Algunas de sus pruebas y animaciones colocarán de rodillas a tu ordenador, y luego podrás comparar tus resultados con los de otros usuarios en línea. La edición más barata de 3DMark Vantage era la Basic, pero Futuremark, su desarrollador, acaba de presentar una nueva actualización que además de realizar algunos ajustes, convierte a la edición Basic en freeware. En general, las ediciones de 3DMark para usuarios finales nunca fueron tan costosas, aunque no se puede decir lo mismo de las licencias comerciales (995 dólares).
Además de obtener una sólida herramienta de prueba sin costo, en caso de que decidas liberar varias de las funciones disponibles en la edición Avanzada, Futuremark te permitirá actualizar tu instalación Basic por unos cinco dólares, menos de cuatro euros. 3DMark Vantage puede realizar algunas pruebas sobre el CPU, pero no hay que olvidar que su fuerte es exprimir al máximo a las tarjetas gráficas. Otro detalle a tener en cuenta será el tamaño de la descarga. Todos los builds 3DMark desde el 2003 en adelante se caracterizaron por ser gigantes, y en el caso del Vantage, tendrás que descargar poco más de 348 MB de instalador. Fuera de eso, no está nada mal tener algo como esto a nuestro alcance, sin gastar un centavo.
