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Análisis: MadWorld

MadWorld es un mar de violencia y salió para la consola más familiar de todas. Ahora la Wii tiene un juego extremadamente violento y divertido, y a pesar de que algunos tengan problemas con esto, ya está a la venta. Aquí te damos nuestra opinión respecto a este juego que nos enamoró con tan solo algunas imágenes. ¿Por qué? Porque bien en el fondo, todos sabemos que empalar gente es divertido… excepto que sea uno mismo, por supuesto.

Sí… ¡¡¡SIIIIIII!!! Perdón, nos emocionamos un poquito. No nos malinterpretes, no tenemos problemas con el catálogo de juegos de la Wii, por algo los jugamos. Pero desde que vimos las primeras imágenes de MadWorld nos enamoró desde un comienzo. Todavía quedaban algunas dudas, porque el juego debía ser bueno, pero estéticamente era simplemente perfecto. Ahora lo tenemos en nuestras manos y aquí está el veredicto final.

MadWorld es sangriento. Pero no sangriento como lo es House of the Dead: Overkill. Sino sangriento como pocos juegos lo son. Pero a la vez es muy divertido y gracioso. ¿Cómo es esto? Resulta ser que el tono de MadWorld es bastante particular. La violencia es sangrienta, brutal y muy políticamente incorrecta, pero dentro del contexto del juego (donde todo vale) uno no puede evitar disfrutar el festín de sangre que ofrece.

El concepto bajo el que el juego es mostrado es una ciudad donde el terrorismo reina como fuerza suprema y han transformado toda la localidad en un enorme juego llamado Death Watch. Ahora, como seguramente nadie querría participar en un juego de este tipo, hay una pequeña trampa. Todos los concursantes han sido envenenados y la única manera de obtener el antídoto es llegando hasta el final con vida. En MadWorld ocupas el lugar de Jack, un participante misterioso que a fuerza de talento consigue un sponsor anónimo.

En sus raíces MadWorld es un beat ‘em up, pero aquí está la diferencia entre uno bueno y uno malo: la jugabilidad de MadWorld cambia. Varía de diferentes maneras para que nunca se torne aburrido o repetitivo y además dura exactamente lo que tiene que durar. En la primera pasada puede tomarte hasta seis horas, pero también tienes un modo multijugador y muchas armas de diferentes tipos para desbloquear que te darán ganas de jugarlo de nuevo.

Como dijimos, es un  beat ‘em up, así que te pasarás todo el tiempo correteando por el escenario aniquilando a tus enemigos de las maneras más brutales posibles. Y es que hay muchas maneras. Todo en el juego es sensible a contexto, eso quiere decir que si tomas a un pobre desgraciado y te acercas a un inodoro, con un pequeño gesto podrás atascarlo y esperar a que la cadena haga el resto. Lo mismo sucede con tirar sujetos contra paredes con pinches, tachos de basura o empalarlos en todo tipo de objetos filosos. Pero eso no es todo, Jack también tiene una sierra eléctrica que puedes sacar en cualquier momento (siempre y cuando tenga combustible) y eso también ayuda a hacer aún más desastres.

Dentro de cada uno de los niveles también hay minijuegos que hacen la jugabilidad un poco más variada. A veces te subirás a una moto y despedazarás enemigos en movimiento, y en otras tendrás que usarlos de balón de beisbol y apuntar a un blanco enorme para sacar el mejor puntaje. Las batallas con los jefes finales también son bastante épicas, principalmente por la magnitud de aquellos personajes. Generalmente son enormes o extremadamente brutales.

Pero MadWorld no es perfecto. Bueno, para nosotros tal vez lo sea, pero tiene algunos problemas técnicos. El mejor ejemplo de estos problemas es la cámara, sobre la que no tienes completa libertad de movimiento. Solo tienes un botón para colocarla detrás del personaje y esto puede ser un poco tedioso, sobre todo cuando quieres ver de dónde vienen los enemigos. También puedes fijar la mira en un enemigo, pero siempre que quieras hacerlo debes tener presionado un botón a diferencia de apretarlo una sola vez. Este último no es un gran inconveniente, pero es muy poco práctico y cuesta acostumbrarse.

Como todo el juego, gráficamente MadWorld es bastante particular. Durante todo el juego solo hay cuatro colores: blanco y negro para el escenario y los personajes; amarillo para las letras; y rojo, muchísimo rojo, para la sangre. Como se puede ver en las imágenes, se ve grandioso y el diseño artístico lo hace aún más peculiar de lo que ya es.

Por supuesto que no podía salir un juego extremadamente violento para Wii y no tener algún tipo de controversia alrededor. Al parecer el Insituto Nacional de Medios y la Familia (NIMF) ha mostrado su descontento con la salida de este juego en una consola que “solía ser amigable para las familias.” Y que este juego acaba de arruinar la reputación de Nintendo. Lo que habría que decir aquí es que no habría que censurar los juegos que salen, sino que los padres hagan su trabajo y estén con sus hijos al jugar, o aunque sea, que vean lo que juegan. Porque nadie con dos dedos de frente dejaría que su hijo juegue MadWorld. Mientras tanto es el producto perfecto para un público maduro como el nuestro. 

En caso de que quieras empalar gente, podrás conseguir MadWorld desde el 20 de Marzo exclusivamente para Wii, por el nunca módico precio de €59,98. ¿Es caro? Sí. ¿Vale la pena? Por supuesto. Aquí tienes seis horas de puro entretenimiento con algunas más si lo quieres volver a jugar con todo el contenido desbloqueado y el modo cooperativo.

Qué se puede decir, MadWorld es espléndido. Siempre y cuando puedas aguantar los excesivos niveles de violencia y una cámara un poco torpe, aquí no hay desperdicio.

Puntaje: 90%

Conclusión: Si lo tuyo es la violencia sin límites ni razón, entonces no hay mucho que meditar.

Escrito por Tomás Garcia

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