Seguramente alguna vez has dado con un sitio o programa que te ha “informado” que tu ordenador podría estar en peligro o algo parecido. A los programas que usan esta táctica se los llama Scareware. De la palabra susto (scare), este tipo de software pretende atemorizar a los usuarios para que adquieran, generalmente, la versión paga o completa de la misma aplicación. Y la que paga es la tía solterona, que se lo cree.
Microsoft, junto con el Fiscal general de Washington, llevarían a juicio a varios creadores de Scareware. Aparentemente, este tipo de aplicaciones se están ganando un lugar entre los más odiados de Internet. Junto con el spam, serían los responsables de generar la mayoría de los problemas a los usuarios de la red de redes. Este paso legal se daría gracias a una "actualización" en las leyes que haría ilegal los programas tipo Spyware y aquellos que hagan publicidad falsa, prometiendo arreglar problemas inexistentes.
Según el fiscal, aprovechando un servicio para comunicaciones en redes empresariales, estas compañías habrían enviado carteles prácticamente iguales a los del sistema operativo. En estos, se informaba de posibles problemas y se instaba a los usuarios al visitar un sitio donde se ofrecía un chequeo gratuito. El problema es que este chequeo siempre arrojaba errores críticos y luego pedía dinero para arreglarlos.
Microsoft declaró que la mitad de las llamadas que recibe por soporte son de problemas relacionados con Spyware. La pena, si se encuentra culpables a los acusados, es de 2000 dólares de multa por incidente, restitución y los honorarios de los abogados. Hace un tiempo se había llevado a cabo una reforma similar, pero terminó en la nada por un vacío legal. No negamos la buena voluntad de Microsoft, pero nos parece que puede ser que los números y declaraciones tengan una cierta inclinación a defender los propios intereses (cosa que no está mal, pero que es importante aclarar).
