¡Es un ave! ¡Es un avión! ¡Es Superman con el traje de Batman! No. Es el Wing 7, una nueva forma de generar energía limpia a través de los fuertes vientos que se dan en las alturas a las cuales las turbinas eólicas convencionales no llegan. Buscando una forma de potenciar la generación de energía eólica aprovechando lo que sucede gratuitamente en las alturas, el equipo de Makani’s Power ha desarrollado una turbina eólica voladora. Con forma de aeroplano, esta turbina genera casi 20 kilowatts de energía limpia y supera la eficiencia de las fijas.
La incansable búsqueda por prototipos que peguen fuerte en la eternamente incipiente industria de las energías alternativas sigue propiciando que veamos invenciones muy sofisticadas. Es que mientras que algunos se devanan los sesos mirando al suelo y buscando alternativas para generar energía ecológicamente sustentable y económicamente sostenible, otros alzan la mirada al cielo y, más optimistas, se ponen manos a la obra. Con este impulso surgió el proyecto de Makani’s Power. El objetivo fue crear una fuente de energía eólica que no tuviera periodos de poca efectividad debido a la ausencia de vientos fuertes, y para lograr esto han decidido poner en el aire un dispositivo capturador de aire en forma de turbina eólica voladora que pudiera aprovechar los vientos fuertes de las alturas. Conozcan al Wing 7.
Luego de tomar vuelo en forma de avioneta, este dispositivo energético puede ascender a unos 400 metros de altura y volar sin asistencia alguna generando casi 20 kilowatts de poder aprovechando los vientos de 35 km/h que, según la zona, suelen habitar las alturas. Construido con fibra de carbón en su mayoría, el llamado Wing 7 mide 8 metros desde la punta de un ala a la otra y pesa aproximadamente unos 58.4 kg. La forma de remontar vuelo es vertical, y sólo cuando alcanza una altura determinada sus motores comienzan a responder y a volar en forma horizontal haciendo unos círculos que son propicios para recolectar mayor energía a través de los rotores ya que imitan la recepción de viento que tendría una cuchilla de turbina. Mientras generan la energía será transmitida a través de una correa electro conductora hacia su almacenamiento en tierra.
Wing 7 no discute la incomodidad de enviarlo al cielo cada día en contraposición a la instalación de una turbina eólica fija, pero tampoco discute su efectividad en relación a estas al tener menor costo de producción, distribución y operación. No hace falta decir que estas turbinas eólicas voladoras no son una idea extravagante o única, pero sí es esta la primera que se lleva a cabo con resultados tan promisorios que han logrado captar la atención monetaria del ARPA-E y de inversores privados como los fundadores de Google. Es que si esta versión resulta muy interesante, el paso que quiere dar Makani’s Power para el 2015 resulta irresistible, pues buscarán crear una turbina de 1 megawatt operando a 550 metros de altura. ¿Tu qué dices? ¿Tendrán la energía suficiente?
