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2030: El Año de la Tormenta Perfecta

No. No nos referimos a la famosa película, ni tampoco a un acontecimiento climático como Katrina. La tormenta perfecta que está anunciando John Beddington, el principal asesor en materia científica del gobierno de Gran Bretaña, es de otro tipo. En 2030 seremos 8.300 millones de humanos, y la demanda de agua y alimentos superará a lo que el planeta puede proporcionarnos. John vaticina hambrunas y epidemias que corregirán el exceso de seres humanos en el planeta. ¿Qué estamos haciendo para enfrentar el problema?

Como ha ocurrido a lo largo de la historia de la humanidad, con cierta frecuencia aparece algún supuesto “gurú” que vaticina un desastre inminente, del que no nos salvará ni Dios. En los últimos tiempos hemos sido debidamente acojonados por tíos que aseguraban que en el 2000 estiraríamos la pata en masa, o que en el 2012 se acabará el mundo. Generalmente la fundamentación de tales aseveraciones son, como mínimo, endebles y (muy) pocos creíbles. Pero lo mejor de todo es que siempre resultan estar equivocadas. Sin embargo, la tormenta perfecta que está anunciando John Beddington para el 2030 es harina de otro costal. Y puede que efectivamente tenga razón.

John Beddington es el principal asesor científico que posee el gobierno de Gran Bretaña. Tiene una gran reputación sobre sus espaldas, y no es un chalado que invente historias para asustar a los críos que no quieren terminar la comida. Más bien todo lo contrario: basa su trabajo en el análisis de los datos disponibles sobre consumo de alimentos, demandas de energía, cambio climático, aumento de la población, etc. Para Beddington todos estos factores están gestando un desastre de magnitudes épicas que podrían golpear a la humanidad en 2030. Estamos encaminados hacia un escenario muy complejo, en el que el aumento desproporcionado de la población –se estima que seremos mas de 8.300 millones dentro de solo 20 años- hará que, simplemente, el agua potable y la comida no alcance para todos.

La superficie de tierra cultivable aumenta cada día. La tecnología permite a los agricultores obtener cada año mayores cantidades de alimentos por unidad de terreno cultivada. Sin embargo, la velocidad con la que aumenta la cantidad de gente en la Tierra es mayor que el aumento en la tasa de producción. El agua potable, que ya es un problema en muchas partes del mundo, generará conflictos -muchas veces irresolubles- entre países vecinos. El cambio climático, la verdadera cereza del postre, puede hacer que todos estos problemas se vean enormemente agravados.  Según el experto británico, en las próximas dos décadas la demanda de recursos creará una crisis con consecuencias devastadoras para el planeta.

Beddington asegura que la demanda de alimentos y energía aumentará en un 50%, y la demanda de agua un 30% cuando la población mundial alcance los 8.300 millones de habitantes. Y para eso solo faltan 20 años. El científico eligió la conferencia “Sustainable Development UK 09” (Desarrollo Sustentable UK 09) efectuada ayer, en Londres, como marco de sus declaraciones.  “El cambio climático exacerbará los problemas de forma impredecible”, dice. “Nos estamos dirigiendo a una tormenta perfecta. No ocurrirá un colapso completo, pero las cosas comenzarán a ponerse muy preocupantes si no resolvemos estos problemas", agregó.

Vamos a suponer por un momento que Beddington está en lo cierto. Al fin y al cabo, los datos que maneja son reales: la tasa de crecimiento de la población mundial prevé, efectivamente, que en 2030 seremos 8.300 millones de habitantes. Y nadie puede negar que el cambio climático ya está haciendo de las suyas. ¿Qué estamos haciendo para evitar el problema?

Lamentablemente, poco y nada. Si bien existen avances en la forma en que cultivamos alimentos o potabilizamos el agua, lejos estamos de poder suministrar la cantidad de insumos que requerirá semejante población. Beddington dice que el mundo necesitará de más plantas resistentes a enfermedades y pesticidas, como también de mejores prácticas agrícolas para hacer frente a la enorme demanda de los próximos años. Pero lo más grave es que la mayoria de los gobiernos no hace nada (al menos nada realmente efectivo) para al menos detener el deterioro de nuestro planeta. El cambio climático agravará enormemente la situación. De hecho, el científico prevé que las consecuencias de este cóctel explosivo serán guerras y migraciones masivas.

Hemos ido a la guerra para obtener más territorio, por cuestiones politicas y, por supuesto, para quitarle a otro el combustible fósil que tiene en su subsuelo. No cabe ninguna duda que si escasea el agua o los alimentos nos veremos, otra vez, en medio de graves conflictos. Beddington es muy consciente de esto, y sostiene que debemos enfocarnos ya mismo en la solución al problema de los alimentos. En su opinión, una crisis alimentaria global nos golpeará incluso antes de que lleguen los efectos más serios del cambio climático. A pesar de la crisis económica actual, los precios de los alimentos seguirán aumentando, debido a que el incremento de los niveles de vida trae aparejada una mayor demanda.

No es la primera vez que un científico nos previene sobre el futuro, aunque la de ayer ha sido posiblemente una de las más dramáticas. De hecho, Beddington cree que las hambrunas y epidemias corregirán el exceso de seres humanos en el planeta. Sería, literalmente, un sálvese quien pueda. Por supuesto, tenemos una salida: ponernos ya mismo a anticipar el problema. La pregunta del millón es si lo haremos.

Escrito por Ariel Palazzesi

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