Tomás Garcia
Investigadores en Microsoft Research presentarán dentro de poco un estudio que demuestra que el cuerpo humano es capaz de transformar la interferencia electromagnética en una señal utilizable para interfaces gestuales. Y podría dar lugar a poder controlar cualquier dispositivo eléctrico de nuestro hogar, tocando la pared más cercana a nuestra posición. Desde allí, las posibilidades podrían ser infinitas.
En los últimos años Microsoft Research ha presentado novedades muy interesantes, pero muy pocas se asemejan al estudio llevado a cabo por Gabe Cohn, Dan Morris, Shwetak Patel y Desney Tan, bien denominado Your Noise is My Command (Tu ruido es mi Comando). En pocas palabras, este estudio demostraría cómo cualquier pared de tu hogar, podría convertirse en una pantalla táctil a través de radiaciones electromagnéticas. Esto quiere decir, que con cualquier superficie en tu hogar, podrías controlar la televisión o una consola de juego.
Inicialmente la idea puede sonar un poco alocada, pero la explicación no es muy complicada, según detalla el estudio presentado por estos investigadores. Cuando una persona toca una pared que detrás tiene un cableado eléctrico, esta se convierte en una antena humana que sintoniza la radiación del ambiente, produciendo una señal eléctrica específica, dependiendo de la posición de su cuerpo y la cercanía a la pared. La idea de estos investigadores es que esta señal eléctrica específica podría ser recolectada por un dispositivo en contacto o cercano al cuerpo de la persona e interpretada por un comando específico.
Durante un experimento, individuos utilizaban brazaletes antiestáticos conectados a un conversor analógico-digital, que transmitía la información obtenida por el brazalete a una portátil que era transportada en una mochila. Esa información luego fue analizada por algoritmos de aprendizaje para identificar cambios eléctricos característicos que correspondían a la cercanía de una persona con la pared, la posición de su mano y su ubicación en la casa. Todos parámetros que cambiarían el tipo de interacción que se puede tener con la pared y los usos que se le podría dar a esta nueva interfaz.
Este simple concepto, puede ser el inicio de una nueva generación de interacción con la tecnología. Pensar en controlar un juego en una consola con la pared es tan solo una de las más alocadas. Yendo a cosas más simples, podríamos encender luces desde cualquier lugar de la casa, con tan solo tocar la pared o, ya de por sí, interactuar con cualquier aparato eléctrico del hogar, tocando la pared que tengamos más cercana a nuestra posición. Sin duda falta mucho para que podamos ver algo así, pero el concepto ha sido demostrado y el futuro de esta tecnología se ve muy prometedor.
