Se adjudicaron muchos riesgos teóricos al LHC, desde la creación de un agujero negro capaz de devorar la Tierra hasta la generación de “strangelets”, pero a nadie se le ocurrió pensar en zombies… ¿cierto? Aunque en estos días no falta material relacionado con la (inevitable) invasión zombie, “DECAY” agrega una vuelta de tuerca extra con estudiantes del CERN, un accidente en el LHC, y algunos seres con cierta predilección por la carne humana. Quien escribe y dirige a DECAY es un estudiante Ph.D de física, los actores son físicos también, y cuando esté terminada, su acceso será completamente gratuito.
Entre el reciente estreno de la tercera temporada de The Walking Dead y el paso de Halloween, la temática zombie ha tenido un pico de actividad notable. También se pueden ver cada vez más zombies en videojuegos, por lo que se puede decir que se han convertido en el “enemigo” preferido de la ficción en el Siglo XXI. Ahora, cuando un físico se cruza con zombies, las posibilidades son varias: Puede ser quien los creó, es el primero en morir, el que trata con desesperación de buscar una “cura”, el incrédulo que los tilda de simple delirio, o todo eso a la vez, y no necesariamente en ese orden. También son muchas las formas en las que un científico puede iniciar el apocalipsis zombie, por lo tanto, ¿por qué no usar el LHC?
Así aparece “DECAY”, un proyecto del estudiante Ph.D de física Luke Thompson, cuyo trabajo actualmente lo estaciona en el CERN. La historia nos muestra a un grupo de estudiantes (que dicho sea de paso, también son físicos) forzado a luchar por sus vidas luego de una falla catastrófica en el LHC. Al parecer, el archifamoso bosón de Higgs tiene efectos inesperados en el equipo de mantenimiento, cuyos elementos transformados en zombies comienzan a perseguir a los sobrevivientes a través de los túneles ubicados bajo tierra.
De acuerdo a Thompson, la idea para DECAY se manifestó en febrero de 2010, cuando mencionó en broma a sus colegas que los túneles bajo CERN eran el lugar ideal para una película de zombies. La película tiene un presupuesto de apenas dos mil libras esterlinas, y en total intervinieron veinte personas en su creación. Para la filmación se utilizaron cámaras Canon EOS 5D Mark II, mientras que los efectos y la edición posterior se realizaron bajo Premier Pro y After Effects. DECAY tendrá su estreno dentro de tres semanas en Manchester, y poco después estará disponible a través de la Web en forma gratuita, bajo licencia CC.
