Menu
in

Presentan robot que puede “tejer” a su alrededor

El gusano de seda es uno de los insectos más estudiados y modificados genéticamente del planeta. Su capacidad de crear seda ha sido un estímulo económico durante miles de años, pero algo que también sorprende de estas criaturas es la forma en la que crean sus capullos. El grupo Mediated Matter dentro del MIT Media Lab ha desarrollado un brazo robótico que busca imitar el “proceso de construcción”, tejiendo su propia estructura. El resultado se asemeja más a una tela de araña, y el robot tiene ciertas limitaciones, pero nada impide que pueda cambiar el futuro de la construcción.

Se dice que la cría de gusanos de seda se originó en China hace unos cinco mil años. De más está decirlo, su seda es muy apreciada, y representa a una industria muy compleja. Pero no hay razones para limitarse a la seda cuando admiramos a estos insectos. La forma en la que construyen sus capullos es impresionante, y no quedan dudas de podríamos tomar prestadas una idea o dos de ese proceso. Uno de los caminos preferidos por científicos, ingenieros e investigadores para reproducir ciertas acciones de la naturaleza es recurrir a la robótica, y así es como encontramos a este brazo robótico proveniente del MIT Media Lab.

El brazo es capaz de desplegar tela a su alrededor, aunque esto no se parece tanto a un capullo, sino que guarda cierta similitud con una tela de araña, otro insecto que tampoco se queda atrás a la hora de extender sus redes. El robot busca explorar el concepto de “construcción aditiva”, en la que cada parte es creada colocando una capa de material sobre otra. Si esto te suena a impresión 3D, es porque el grupo Mediated Matter encargado de desarrollar al robot dentro del MIT Media Lab también investiga diferentes métodos de impresión 3D.

Debemos mencionar que, si bien el desarrollo demuestra un avance notable para ser un proyecto de tres semanas, el robot está “haciendo trampa”. ¿Por qué? Dejando de lado el hecho de que no puede crear su propia seda, el robot conoce exactamente la posición de cada uno de los “ganchos” donde coloca su tela, por lo que ha sido “pre-progamado”. Sin embargo, en el futuro se espera que el robot sea capaz de detectar ganchos y otros puntos de anclaje por cuenta propia, creando así un diseño dinámico y personalizado. Al mismo tiempo, buscarán utilizar una especie de nylon que altera sus propiedades de acuerdo a la humedad. Con el desarrollo suficiente, esto podría cambiar algunas de las reglas de construcción, pero la pregunta final siempre queda a manos del futuro consumidor. ¿Vivirías en el interior de un capullo?

Escrito por Lisandro Pardo

Leave a Reply