Menu
in

SETI deja de buscar a ET por falta de fondos

Parece que los extraterrestres ya no tienen quien les escuche. El  Allen Telescope Array (ATA), compuesto por 42 enormes antenas receptoras de ondas de radio, construido gracias a una donación del cofundador de Microsoft, Paul Allen, ha sufrido las consecuencias de la crisis financiera. SETI, la entidad estadounidense dedicada a la búsqueda de inteligencia extraterrestre, ha decidido suspender -al menos hasta 2013- las actividades del complejo por falta de fondos. Se trata de un duro golpe a los planes de detectar señales de vida alienígena.

La búsqueda de inteligencias extraterrestre a través de sus posibles emisiones de señales de radio acaba de sufrir un duro revés. En las ultimas horas, el vocero de SETI, la entidad encargada de coordinar y promover los esfuerzos en este sentido, acaba de anunciar que se paralizarán las actividades de su mayor radiotelescopio hasta que se consigan nuevos fondos. Se trata del Allen Telescope Array (ATA), un complejo gigantesco compuesto por 42 enormes antenas receptoras de ondas de radio, que fue construido en buena medida gracias a una donación de más de 25 millones de dólares efectuada por el cofundador de Microsoft, Paul Allen. El centro de escucha, cuya construcción costó en total 50 millones de dólares, suspenderá sus actividades completamente, apagando sus equipos y desconectando todos sus sistemas al menos hasta 2013.

Los responsables del proyecto confían que el Telescopio Allen pueda volver a operar el año 2013, cuando tenga lugar la nueva ronda de donaciones. Si todo sale como creen (y no se produce ninguna nueva “catástrofe económica” antes de esa fecha), los ingresos que conseguirán ese año les garantizarán la nueva puesta en marcha del radiotelescopio durante cinco años. Ubicado entre las montañas situadas al norte de California, las antenas del ATA han   registrado las señales provenientes el espacio exterior desde su puesta en marcha en 2007, buscando alguna evidencia de vida extraterrestre. Su normal funcionamiento requiere de 1.5 millones de dólares anuales, monto que no han logrado reunir. Se calcula que un aumento de solo tres centavos de dólar en los impuestos que pagan los estadounidenses bastaría para garantizar la operación del ATA.

La mala noticia fue anunciada a los benefactores de la Universidad de California en Berkeley, institución de la que depende el complejo, por Tom Pierson, el director ejecutivo de SETI, a través de un sentido correo electrónico. Se trata de una mala noticia, ya que entre otras actividades, este radiotelescopio era el encargado de “escuchar” los 1.235 exoplanetas que hasta el momento ha detectado la sonda Kepler de la NASA. En el correo enviado por Pierson puede leerse que “la puesta en hibernación del radiotelescopio significa que los equipos no estarán disponibles para las observaciones de rutina, aunque su mantenimiento está asegurado por dos equipos -fuertemente reducidos- de técnicos“, lo que significa que si los fondos aparecen, el sistema “volverá a la vida” en pocas horas.

La falta de fondos atenta fuertemente la continuidad del proyecto de búsqueda de inteligencias extraterrestres mediante ondas de radio. El propio telescopio Allen, que actualmente dispone de 42 antenas de 6 metros de diámetro, había sido proyectado con 350 de ellas, pero las dificultades económicas han impedido que se finalice la obra. Los visitantes del sitio oficial del SETI pueden ver como desde la web se pide que donen fondos para reanudar el proyecto. Históricamente, el proyecto SETI dependió del “tiempo prestado” por instrumentos como el telescopio de Arecibo, en Puerto Rico, situación que limitaba su capacidad. La construcción del ATA permitió, por fin, a los radioastrónomos disponer de un instrumento para escudriñar el cielo 24 horas al día, siete días a la semana, pero parece que este sueño ha terminado. Al menos, hasta 2013.

Escrito por Ariel Palazzesi

Leave a Reply