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YouTuber casi muere al meter su cabeza en un microondas lleno de cemento

Dos millones de reproducciones, y contando

En el nombre de la viralidad… lo que sea. Cualquier cosa estúpida que pase por la mente del YouTuber de turno. Algunas de ellas ya tomaron vidas, tal y como sucedió con Pedro Ruiz en su momento, y durante esta semana, casi se llevan otra. Jay Swingler, responsable del canal TGFbro, tuvo la brillante idea de colocar su cabeza dentro de un microondas repleto con masilla multipropósito de secado rápido… y requirió la ayuda de los servicios de emergencia.

Para ser sincero, no se por dónde empezar. Si bien el título del artículo explica con precisión qué es lo que sucedió, la situación en general es tan absurda que me faltan palabras. Creo que voy a comenzar diciendo lo siguiente: No es la primera vez que sucede algo así en el canal TGFbro. De hecho, si estudiamos algunos de sus vídeos previos veremos a Jay Swingler atrapado en gelatina, líquido de bronceado artificial, y cemento tradicional. Esta clase de… contenido le ha dado a su canal más de tres millones de suscriptores, con un promedio que se ubica muy por arriba del millón de reproducciones en cada uno de sus vídeos.

El problema no es difícil de entender: Sus amigos trataron de acelerar el secado de la masilla, que además de ponerse dura, también se expande (después de todo, su aplicación principal es rellenar fisuras y cubrir defectos). El plan de Swingler era colocarse una bolsa en la cabeza y usar una pequeña manguera para respirar, pero la presión de la masilla hizo que él y sus amigos entraran en pánico. La solución no fue otra más que llamar al 999. Con mucho profesionalismo y una significativa cantidad de paciencia, los rescatistas lograron separar a Swingler del horno de microondas.

Tras la ola de comentarios, Swingler hizo exactamente lo que uno espera de cualquier YouTuber: Defender su vídeo, declarar que «no le importan» los dichos de la gente (aunque no dudó en insultar a sus críticos), y en cierto modo demostrar orgullo por su pequeña creación. Incluso tuvo la suerte de evitar el recibo oficial de 650 libras esterlinas, porque el servicio de bomberos de West Midlands concluyó que el riesgo de muerte era «legítimo»…

Escrito por Lisandro Pardo

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