Una vieja frase dice que un hombre preparado vale por dos, ¿pero a qué extremos debe llegar esa preparación? De acuerdo con una patente publicada en el año 1981… respirar a través de un retrete. Así es: Con la ayuda de un dispositivo especial, una persona atrapada en una habitación que no puede respirar debido a un incendio o al exceso de humo, logrará acceder a oxígeno adicional en las cañerías de descarga, separadas del aire contaminado por la trampa de agua del retrete…
El ejercicio es mucho más interesante de lo que parece: Vamos a suponer que una persona se hospeda en el piso 25 de un hotel de lujo. El hotel comienza a sufrir múltiples incendios, bloqueando la posibilidad de subir o bajar de piso. El aire se contamina rápidamente, y por cuestiones de seguridad, las ventanas no se abren. De un modo u otro, esa persona necesita ganar tiempo hasta que lleguen los bomberos. Romper una ventana podría ser una opción, ¿pero qué otras alternativas existen?
De acuerdo con William O. Holmes y su patente US4320756A del año 1981 (concedida un año más tarde), el «Snorkel de retretes» podría salvar la vida de esa persona. En realidad, ese no es su título oficial. La patente habla simplemente de un «dispositivo de respiración de aire fresco», pero todo queda claro una vez que estudiamos los dibujos técnicos.
En esencia, el dispositivo es una manguera flexible que la persona atrapada introduce en el retrete (léase inodoro, váter, etc.) más allá de la trampa de agua. De ese modo, accede al «aire fresco» que está separado por el líquido. En uno de los dibujos, el dispositivo termina como cualquier manguera, pero existe la opción de conectar ese extremo a una máscara. Otro elemento importante aparece en las Figuras 3 y 4: Un filtro de carbón activado que limita la exposición a los gases de cloaca y otras impurezas.
Por supuesto, determinar la efectividad de ese filtro sería un ejercicio en sí mismo, pero lo cierto es que nadie fabricó al snorkel de retrete como «producto comercial» (o al menos, no he encontrado ningún caso). Ahora que la patente expiró, supongo que algún entusiasta extremo del DIY podría hacer la prueba…
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Fuente: Vintage Everyday
