Lisandro Pardo
Es nuestra última aventura fotográfica del 2018, y como cierre me gustaría hablar de una cámara… diferente. En general estamos acostumbrados a la flexibilidad de las mirrorless y las DSLR, y aunque la Nikon Coolpix P1000 no se queda demasiado atrás, al mismo tiempo posee un rol mucho más definido, que es la captura de naturaleza, animales, y astrofotografía. La P1000 está definida por su teleobjetivo integrado de 125 aumentos y una distancia focal equivalente máxima de 3.000 mm, pero si quieres un poco de vídeo 4K dentro del paquete, también lo recibirás.
Usualmente, cuando hablo de «comodines» me refiero a los objetivos con una distancia focal variable. Muchos fabricantes de cámaras incorporan objetivos con estas características en la forma de kits, ¿pero qué sucede cuando el comodín «es» la cámara en sí? Cualquier idea de una cámara con un objetivo fijo e imposible de reemplazar puede parecer un retroceso, y tal vez recuerde a las clásicas point and shoot. Sin embargo, en el caso de la Nikon Coolpix P1000 descubrimos un monstruo mucho más complejo. Admito que no es difícil encontrar cámaras con especificaciones más amplias a un precio inferior (en especial si no estás interesado en semejante distancia focal), pero una vez que el cañón de la P1000 entra en acción… hay que hacer una pausa.
Nikon Coolpix P1000: Tan cerca, y a la vez tan lejos
Presentada oficialmente en septiembre de este año como reemplazo de la P900, la Nikon Coolpix P1000 posee un sensor CMOS de 16 megapíxeles efectivos. Su sensibilidad ISO va desde 100 hasta 6.400 sin modos Boost (100-1600 en vídeo), y la velocidad de obturación se extiende de 1/4000 a 30 segundos. La pantalla LCD integrada es de 3.2 pulgadas, completamente abatible, y con una resolución de 921.600 puntos, pero no trae soporte táctil. El visor electrónico utiliza tecnología OLED, la definición llega a 2.35 millones de puntos, y su cobertura es del 99 por ciento horizontal y vertical.
3.000 milímetros. El número es escalofriante por donde se lo mire, y para ser sinceros, más de lo que cualquier fotógrafo necesitará en la mayoría de sus sesiones. Aún recuerdo muy bien al teleobjetivo Canon de 1.200 milímetros, que pesaba 16 kilogramos y debía ser movido por dos personas. No voy a negarlo: La Nikon Coolpix P1000 es grande, y pesa 1.415 gramos con las baterías instaladas, pero en comparación con soluciones más «tradicionales» por así decirlo, esta cámara es una pluma. Aún así, al trabajar con estos valores surgen otros detalles como la difracción, las variables atmosféricas y el «efecto calor» que inevitablemente afectan la nitidez. Es una balanza que como usuario de la Coolpix P1000 deberás equilibrar, y con un poco de práctica extra, las tomas que obtendrás serán extraordinarias.
La interfaz de la Nikon Coolpix P1000 se inclina más en favor de una réflex tradicional que de una point and shoot. El clásico M-A-S-P aparece en el dial de modo junto al Full Auto y la entrada U que nos permite programar ajustes. El resto de las entradas nos llevan al menú de escenas, al modo creativo, al modo de vídeo, y a dos modos de escenas especiales: Luna y Aves. Ambos revelan con cierta sutileza cuáles son los puntos más fuertes de la Nikon Coolpix P1000. El ángulo de visión bajo el modo Luna equivale a unos 1.000 mm, el disparador automático se configura a 3 segundos, y habilita ajustes de tono y brillo, mientras que en el modo Aves el ángulo predeterminado baja a 500 mm, y podemos acceder al Burst de 7 FPS (con un búfer de apenas siete disparos). Por supuesto, ambos modos pueden ser personalizados, pero si deseas disparar RAW deberás salir de ellos. Para más datos, consulta el manual.
A la hora de grabar vídeo, el rendimiento de la Nikon Coolpix P1000 es aceptable en la gran mayoría de los casos. La cámara soporta 4Kp30 y 4Kp25 sin crop, pero también podrás extraer un 1080p60 más que decente. Dicho eso, el vídeo no es su prioridad, y hay algunos modelos (incluso más económicos) que ofrecen mejores resultados en 4K (digamos, la Sony Alpha A6300). Por otro lado, Nikon admite que en condiciones más desfavorables puede haber un poco de «rolling shutter». El almacenamiento de contenido se realiza a través de una ranura compatible con tarjetas SD, SDHC y/o SDXC, y al estudiar de cerca el factor conectividad encontramos soporte WiFi y Bluetooth, que nos permite enlazar un smartphone a la cámara usando la aplicación SnapBridge. Su último update se remonta a septiembre (mes en el que debutó la P1000), y eso se traduce en un modo de mando a distancia demasiado básico en comparación con lo que puede hacer la Nikon Coolpix P1000.
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Accesorios para Nikon Coolpix P1000
Al ser una cámara relativamente nueva, el precio de la Nikon Coolpix P1000 sigue en el nivel de los 1.100 euros (al que podemos considerar «correcto»), pero con el paso del tiempo (y tal vez una reacción por parte de la competencia) el número se hará más amigable. La buena noticia es que no hay tanta presión por el lado de los accesorios. Con una buena mochila, trípodes y soportes sólidos, una expansión de energía y ocasional filtro, estarás más que listo para exprimir tu P1000 al máximo.
Baterías y alimentación
El rendimiento de una batería EN-EL20a en la Nikon Coolpix P1000 es de 250 disparos con un uso del flash del 50 por ciento. Eso significa que en promedio el usuario obtendrá mayor cantidad de fotos por carga, pero el valor final sigue siendo un poco bajo. La solución no es otra más que complementar los recursos de fábrica con un módulo EN-EL20a adicional, y un cargador Gloxy 2 en 1 para casa y coche. Ambos se encuentran agotados al momento de escribir este párrafo, pero el combo no debería demandar más de 65 euros (sin envío).
Trípodes y soportes
Tal y como lo mencionamos más arriba, la Nikon Coolpix P1000 pesa 1.415 gramos con su batería instalada. Además, una vez que extendemos el objetivo modificamos el centro de gravedad, y la cámara se vuelve pesada «hacia adelante». Eso significa que en materia de trípodes para Nikon Coolpix P1000, necesitaremos flexibilidad y robustez a la vez. Entre los trípodes normales aparece el Gloxy GX-T6662A Plus, que expande las virtudes del modelo original con un gancho en la parte inferior de la columna central (que nos ayuda a insertar más peso en la configuración), y la posibilidad de conectar la rótula allí. En la otra acera, el Clampod Takeway T1 será más que suficiente para cubrir cualquier uso intermedio, y su carga máxima de 40 kilogramos elimina de raíz cualquier duda sobre su resistencia.
Mochilas y bolsos
Con la Nikon Coolpix P1000 no hay objetivos secundarios para cargar. Se supone que eso debería entregar algunas ventajas en lo que se refiere a transporte, pero no hay que descuidarse por un simple detalle, y es que no posee sellado contra la hostilidad del clima. Por suerte, la búsqueda de una buena mochila para Nikon Coolpix P1000 no es complicada, y comienza con la serie Gloxy Pro AW, que trae un interior acolchado y personalizable, y una funda impermeable extra. Ahora, si prefieres un estilo con banda de hombro y un color más neutro sin sacrificar impermeabilidad o acceso a múltiples bolsillos auxiliares, lo que buscas es el bolso Lowepro Toploader Zoom 55 AW II.
Flashes
Repitiendo nuestra clásica letanía, «Sin luz no hay foto, que sobre y que no falte». La Nikon Coolpix P1000 tiene flash incorporado, y sólo tropieza bajo las configuraciones más extremas, pero del mismo modo en el que el manual de Nikon recomienda un trípode para situaciones de baja luz, también deberíamos sumar un flash. Dos recomendaciones: La primera, el Gloxy GX-F1000N profesional con número de guía 58, 20 geles de regalo, pie, estuche y difusor. La segunda, el Gloxy TR-985, con número de guía 54, el paquete pie-estuche-difusor, y un precio de apenas 100 euros.
Filtros
- 3 filtros imprescindibles unidos en kit
- Consigue efectos y protege tu objetivo
- Compatible con objetivos de 77mm de diámetro
- Protege la parte frontal de tu objetivo
- Filtro UV, filtro CPL y filtro ND4
No, ningún objetivo para recomendar esta vez. De hecho, ese no es el punto de la Nikon Coolpix P1000. Su cañón 24-3000 debería cubrir todos tus parámetros de uso y mucho más, pero si quieres un toque diferente en tus fotos, ¿por qué no sumar un juego de filtros? El kit Gloxy tiene exactamente lo que deseas. Ya sea un impactante efecto seda o una optimización del contraste y la saturación, estos tres filtros no te defraudarán, y además ayudan en la protección de la cámara. Si hay que sacrificar una pieza para apaciguar a los dioses primordiales de la fotografía, que sea un filtro y no el objetivo…
Y así llegamos al final. La Nikon Coolpix P1000 vive y muere por su 24-3000, y es una categoría en sí misma. Definitivamente no está en mi lista de unidades recomendadas para principiantes, pero tampoco es un modelo deficiente. Muchos esperan que la cámara se adapte al fotógrafo. En este caso, la ecuación funciona un poco al revés. Si la aplicas en el momento y el lugar exactos, si aceptas un rendimiento estándar en aspectos como el vídeo 4K (aunque saca excelentes fotos JPEG más allá del tamaño de su sensor), y te enfocas en naturaleza, paisajes y astrofotografía, quedarás encantado con ella. ¡Buena suerte!
Todos sabemos que se utilizara para fotografiar una naturaleza diferente, la naturaleza de la vecina ?